
Todos los años el 26 de julio se conmemora el Día Internacional de la Conservación del Ecosistema de Manglar, declarado el 2004 por la organización latinoamericana Redmanglar Internacional (RMI) y posteriormente adoptado en 2015 por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés).
Día Internacional de la Conservación del Ecosistema de Manglar
En esta fecha el activista ambiental de Micronesia, Hayhow Daniel Nanoto, murió mientras participaba en una protesta contra la instalación de un estanque ilegal de camarones en un manglar de Ecuador y se celebra cada año con el propósito de resaltar la importancia del manejo y la conservación de los manglares a nivel internacional.

El Manglar es un Ecosistema Especial
Los manglares forman un puente entre la tierra y el mar por lo que son de los ecosistemas más dinámicos que existen en la Tierra, con una producción y reciclaje de materia orgánica constante. Asimismo, los manglares tienen diferentes funciones ambientales dependiendo de su ubicación y de su estructura. En Quintana Roo, por ejemplo, proveen un espacio protegido para la reproducción y desarrollo de muchas especies marinas que habitan el arrecife Mesoamericano; sus densas raíces retienen sedimentos ayudando a filtrar el agua antes de llegar al mar, dándole la claridad que caracteriza a nuestro mar y que permite que el coral sobreviva; producen oxígeno y capturan carbono en grandes cantidades.
¿Por Qué es Un Día Importante Para Sunset World?
A few years ago, after the devastation of Hurricane Wilma, Sunset World rescued the mangrove forest of Tres Ríos Nature Park, which contains the 4 types of mangrove that exist in Mexico: red, white, black and buttonwood. After a successful mangrove reproduction and reforestation program, Tres Ríos Nature Park offers guided tours for members, guests and visitors, raising awareness of its importance. It has even donated mangrove seedlings to reforest affected areas in other parts of the state of Quintana Roo, constituting an example that the mangrove and tourism can coexist and prosper together and that, in fact, they are currently sustainably interdependent.